De forma general, a las personas nos cuesta proyectar el futuro y tomar decisiones de este. Aunque planificar una herencia suele costarnos más, es importante planificarla porque esto nos permite organizar el patrimonio de una manera realista. Esto nos va a ayudar tanto a nosotros como a nuestros seres queridos.
Porque, si no planificamos la transmisión de nuestros bienes, la ley decidirá por nosotros, pudiendo generar conflictos familiares y también importantes pérdidas económicas.
Cuando se piensa en planificar la herencia, es importante otorgar testamento, es un acto sencillo, económico que puede evitar muchos problemas, y más ahora que las circunstancias familiares hoy en día son muy variadas y complejas. Y, además, se puede cambiar tantas veces como se necesite o quiera, por lo que decidamos hoy, lo podremos cambiar en un futuro si nuestra situación ha cambiado.
Pero, también, antes de otorgar un testamento, es importante realizar un inventario del tipo de bienes que conforman el patrimonio y, además, hacer un cálculo de cuánto dinero vamos a necesitar a lo largo de nuestra vida, para evitar así donar un bien que posteriormente podemos necesitar.
Por otro lado, si queremos realizar una donación, al planificar una herencia, podemos determinar que bienes podemos donar y cuáles dejar en herencia.
Los bienes que se dejan en herencia o que se donan en vida, tributan en el impuesto de sucesiones y donaciones, que está cedido a las comunidades autónomas, por lo que el importe que se paga varía en función de la región que vincule para cada tipo de activo. En este punto es preciso tener en cuenta que los planes de previsión y los planes de pensiones tributan en el IRPF, y no en el impuesto de sucesiones y donaciones.
Además, en el caso de las donaciones, el donante deberá tributar por lo que haya ganado desde la compra del bien hasta el momento de la donación (esta plusvalía no tributa en el caso de la sucesión).
En definitiva, tanto desde una perspectiva civil como fiscal, es del todo recomendable planificar una herencia y dejar escrita nuestra última voluntad en un testamento, al objeto de optimizar fiscalmente nuestra herencia, pero, sobre todo, evitar quebraderos de cabeza a nuestros familiares en un momento tan delicado como es la defunción de una persona querida.
Como vemos, hacer una buena planificación sucesoria nos puede ayudar a nosotros y a nuestros seres queridos, es un ejercicio al que conviene dedicarle algo de tiempo, dado que requiere organizar nuestro patrimonio, calcular nuestras necesidades y evaluar la mejor opción para transmitir nuestros bienes en cada caso. Pero, es importante contar con los servicios de un buen abogado de herencias, para que este pueda recopilar toda la información y ayudarte tanto en el ámbito civil, como en el fiscal.
Desde Heritae, nos ocupamos de todo. Nuestros abogados expertos en herencias te ayudarán a resolver todas las consultas que tengas durante el proceso. Nuestro equipo te informará de todo al detalle desde el primer momento en el que contactes con nosotros. Te ayudamos a adjudicar los bienes de una forma más rápida, económica y segura.
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